El asma es una dolencia respiratoria común en los EE.UU. Se estima que 17,7 millones de personas la padecen, según las estadísticas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Aunque está muy extendido, eso no facilita el trato con los pacientes. Aunque no hay una cura conocida, hay ciertos desencadenantes de «ataques» de asma que pueden ser evitados, aquí están cinco de ellos…
Limpiar las superficies en casa
Los mostradores y las mesas son un lugar perfecto para que el polvo y el pelo de las mascotas se junten. Incluso las paredes y los interruptores de luz pueden acumular desencadenantes de asma, aunque sean una superficie vertical.
Se recomienda el uso de productos de limpieza hechos con ingredientes naturales, para no agravar los problemas respiratorios. El uso de limpiadores naturales también puede ayudar a garantizar la seguridad de las superficies de preparación de alimentos; comprueba primero las etiquetas antes de usar cualquier limpiador.
Usar las fundas de almohada y colchón
Los ácaros del polvo son pequeñas criaturas que pueden tener un gran efecto en su salud respiratoria, y les encanta pasar el rato en el dormitorio. Para ayudar a mantenerlos en su lugar mientras duermes, utiliza fundas de almohada y colchón adecuadas para «hacer una barrera entre los ácaros y tú», sugieren los CDC.
También se sugiere evitar el uso de almohadas y edredones rellenos de plumón, así como retirar cualquier animal de peluche de las áreas de dormir, ya que esencialmente son splo recolectores de polvo. El CDC también aconseja usar el ajuste de agua más caliente al lavar la ropa de cama.
Examina a tus mascotas
Puede que tengas un par de compañeros peludos en tu casa que, sin querer, te dificultan la respiración debido a la muda. Si pasas tiempo en un espacio sin animales y notas que puedes respirar más fácilmente, entonces tus mascotas pueden ser los culpables.
Esto puede ser una dura realidad para los amantes de las mascotas, pero si los ha identificado como un desencadenante de asma o alergia, entonces puede ser el momento de empezar a buscar un buen hogar para ellos. Si no quieres llegar a esos extremos, no dejes que las mascotas entren en la habitación de los asmáticos y aspiren a menudo.
Evitar el humo del cigarrillo en el hogar
Cada vez se sabe más que el humo del cigarrillo es un agente nocivo, y puede ser especialmente peligroso para quienes padecen enfermedades respiratorias. No solo los fumadores deben prestar atención a los factores desencadenantes de su asma; el humo de los cigarrillos es una gran preocupación para los no fumadores con asma.
De hecho, WebMD señala que «inhalar humo de segunda mano, también llamado ‘humo pasivo’ o ‘humo de tabaco ambiental’, puede ser incluso más perjudicial que fumar en realidad». Esto se debe a que los subproductos nocivos de la combustión de un producto de tabaco (es decir, el alquitrán y el monóxido de carbono) se producen a partir del extremo del cigarrillo o del cigarro (en lugar de la punta).
Revisar los índices de contaminación
Aunque es más fácil influir en las condiciones interiores que en las exteriores, hay cosas que hay que tener en cuenta cuando estás fuera. Los contaminantes del aire como el polen pueden desencadenar asma ( el polen es peor en la primavera y el otoño), así como la contaminación de las fábricas y los vehículos.
El polen está aparentemente en su peor momento entre las 5 a.m. y las 10 a.m. y de nuevo al atardecer, según WebMD. También puedes consultar el Índice de Calidad del Aire (ICA) de tu ciudad para ver si las condiciones son favorables para un paseo.