Uno de los retos de los pacientes con diabetes es adecuar su condición para llevar una vida normal y, cuando esta patología se presenta en mujeres que recientemente dieron a luz, la prueba suele ser aún mayor.
En nuestro especial de la Semana de la Lactancia Materna te daremos algunos útiles consejos para que, si tienes diabetes tipo 2 o desarrollaste diabetes gestacional y te convertiste en mamá, conozcas cómo manejar tu glucosa sin afectar la alimentación de tu bebé.
Lo primero que debes saber es que no en todas las pacientes con un diagnóstico de diabetes y que dan a luz los niveles de glucosa se mantienen iguales. Es decir, hay algunas mujeres que durante las primeras semanas después del parto podrían alterarse o normalizarse sus índices de glucosa.
En ese sentido, la principal recomendación será que midas constantemente la glucosa para saber cómo se encuentra. Esto te permitirá conocer la cantidad de insulina que tu cuerpo necesita. Recuerda, el contacto constante con tu médico endocrinólogo es indispensable.
Madres con diabetes
Una de las anomalías más comunes durante el período de concepción es la diabetes gestacional. Sin embargo, luego de que tu bebé nace, esta enfermedad suele desaparecer, siempre y cuando la mujer haya implementado una dieta balanceada y un plan de actividad física constante.
No obstante, es importante que chequees con periodicidad los niveles de glucosa y le informes a tu doctor todo sobre tu estado de salud, como el de tu bebé. Es decir, consulta por lo menos cada 2 o 3 años si debes hacerte pruebas para detectar la diabetes tipo 2.
Cabe aclarar que, según han informado diversas investigaciones y estudios a nivel internacional, amamantar con frecuencia a los bebés disminuye el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
“Este riesgo es especialmente en mujeres que han tenido diabetes gestacional y tiene un efecto protector retrasando el inicio de diabetes y disminuyendo su frecuencia en la infancia”, aseguran informes.
Recomendaciones:
Sin embargo, si padeces diabetes, puede que presentes problemas en la producción de leche lo que podría desarrollar ciertas dificultades tanto para la madre como para el lactante, tales como: macrosomía, prematuridad, hipoglucemia precoz, hipocalcemia, problemas respiratorios, ictericia, poliglobulia y malformaciones.
En ese sentido, recomiendan los especialistas, es mejor que recurras a la extracción de la leche de manera manual o con una bomba precoz que te permita almacenarla en el refrigerador para después dársela a tu pequeño.
De acuerdo con el portal Diabetes.org, algunos de los tips que puedes implementar para poder lactar con tranquilidad a tu pequeño, siendo paciente de diabetes, son:
- Comer un bocadillo antes o mientras amamantas al infante.
- Tomar suficiente líquido, además de beber sorbos de agua o una bebida sin cafeína mientras das de lactar.
- Siempre ten a la mano algo para elevar la glucosa si te baja cuando estás amamantando, esto permitirá que no te veas forzada a detenerte para corregir tu nivel de glucosa.