Durante un webinar organizado por la Asociación Civil para el Enfermo de Psoriasis (AEPSO) y la Asociación Puertorriqueña de Ayuda al Paciente de Psoriasis (APAPP), un equipo de especialistas exaltó los beneficios del tratamiento en diferentes fases de la enfermedad.
Los corticosteroides son fármacos que usualmente se recetan con mayor frecuencia para tratar la psoriasis de leve a moderada y están disponibles en presentaciones como ungüentos, cremas, lociones, geles, espumas, espráis y champús.
¿Funcionan en todos los pacientes?
Es importante destacar que, la psoriasis, al ser una condición que surge del sistema inmune y tiene varios mediadores que están ocasionando la inflamación.
Así, las variaciones entre un paciente y otro pueden deberse al rol protagónico de estos mediadores por lo que, los inhibidores o bloqueadores de interleucina como por ejemplo, el 17 o 23, pueden funcionar en unos y otros no.
La clave está, en tratar distintos medicamentos hasta encontrar el que funciona en cada paciente, fomentando la necesidad de la medicina personalizada o la combinación de diferentes tipos con el fin de mejorar la calidad de vida del paciente.
Por ahora, se debe tratar al paciente con distintos medicamentos, no dejando de recordar que los mismos, tardan un poco en trabajar.
En algunos pacientes, pueden tardar de 2 o 4 semanas en verse mejoras, mientras otros pueden tardar de 2 a 3 meses, por eso, las guías de tratamiento sugieren esperar hasta tres meses antes de cambiar un medicamento.
“Cuando hablamos de artritis, los pacientes esperan una remisión total o sea nada hinchado, nada que le duela y lo podemos conseguir en muchas ocasiones, pero no necesariamente tiene que ser así, tener a veces 50 – 60 o 70% de mejoría es muy bueno, entonces lo que hacemos no es cambiar el medicamento, sino añadirle algo por ejemplo intravenoso o cambiar la dosis, hay cosas que se pueden hacer y depende de cada paciente”, explicó durante el webinar el Dr. Soto, especialista en reumatología.
“En una psoriasis leve, por ejemplo, la aparición de placas solamente en el área de los codos, el uso de cremas, lociones y ungüentos con corticoides, son de primera línea y por ende la primera elección, y no debe tenerse temor a su uso”, explicó la doctora Cristina Echeverría, dermatóloga y presidenta de la Sociedad Argentina de Psoriasis.
La recomendación es que debe aplicarse como lo indique el médico, por periodos de tiempo determinados, no utilizarlo de forma permanente o combinarse con medicamentos.
Tipos de corticoides
“A los corticoides tópicos siempre que estén bien indicados, en las cantidades correctas, cuidando la superficie en la que se va a aplicar y demás, no le tenemos miedo, al contrario son unas de las principales herramientas que tenemos para el tratamiento de tanto formas menores como complemento a pacientes con drogas sistémicas, pues no necesariamente una droga debe ser un único tratamiento, muchas veces hay que combinar un agente biológico o un metotrexato con una loción crema o ungüento”, detalló la dermatóloga.
Por otro lado, añadió:
“Existen los corticoides sistémicos que se inyectan o se dan por vía oral, este grupo de corticoides se trata de evitar, ya que luego de la suspensión puede producir un rebrote, pese a ello, hay casos particulares, donde se pueden indicar, porque son necesarios para la reumatología y porque en un paciente que tiene un cuadro agudo y no hay con que tratarlo, se puede manejar por un tiempo corto, pero es la excepción y no la regla, por lo que es necesario consultar con el reumatólogo y seguir las indicaciones”, aseguró Echavarría.
Este tipo de medicamento, así como la medicina homeopática, terapias psiquiátricas y psicológicas o el yoga, son muy útiles y complementarias y demuestran que pueden actuar para manejar y controlar la inflamación.
“Lo que podemos decir desde nuestra medicina, es que como complementos si, pero como raíz del tratamiento no, sobre todo cuando está el tema de las articulaciones”, concluyó.