Con el paso de los años, algunos nutrientes se vuelven indispensables para mantener el cuerpo sano, fuerte, activo y sobre todo funcional.
Después de los 40 años, la pérdida de masa muscular se hace evidente y por ello, la ingesta de una alimentación es indispensable en los adultos mayores. Pues al entrar en esta etapa, ya deben traer consigo una disminución considerable de masa muscular y en otros casos, suelen llegar a esta edad, acompañados por alguna condición médica.
Es importante que las personas mayores sigan una dieta variada, equilibrada y moderada, en la que coman entre cuatro o cinco veces al día.
Lo que necesitan
- Que la dieta tenga muchos vegetales y frutas como las fresas que tienen propiedades que ayudan con las arterias
- Los alimentos adecuados para los pacientes con hipertensión u otros problemas cardíacos son aquellos bajos en sodio como el pescado y los espárragos
- Se recomienda una dieta alta en omega-3, compuesta por pescados y nueces que contienen omega-3, brócoli y vegetales de color verde que tiene vitaminas y antioxidantes, hierro y calcio
No deben faltar en el plato:
- Proteína. Combinada con ejercicio ayuda a mantener adecuados niveles de masa muscular, haciéndote sentir fuerte.
- Vitamina D y Calcio. Nutrientes esenciales para ayudar a mantener los huesos saludables.
- Vitamina C. Buena fuente para la formación del colágeno que mantiene sanos los cartílagos y huesos.
- Agua. Se recomienda un consumo diario de agua, en el que funcione como líquido principal frente a otras alternativas. La cantidad diaria dependerá del peso corporal de cada persona.
- Fibra. Necesaria para mantener saludable el sistema digestivo, en promedio. Se sugiere un consumo diario de entre 25 y 30 g, que se obtienen a través de cereales integrales, frutas con piel, hortalizas y leguminosas.
Para algunos adultos, el dulce es indispensable en su día a día, pero en este caso, es importante recordar que su consumo debe ser moderado y ocasional.
Asimismo, se recomienda evitar alimentos ácidos, picantes, frituras y salados, ahumados o cargados en condimentos.
Contrario a ello, se recomiendan las preparaciones a la plancha o al vapor.