Otro año más en el que llegan al verano de Puerto Rico, de manera consecutiva, nubes de polvo del Sahara. Los polvos provenientes de los desiertos en el noreste de África están compuestos por partículas de piedras que llegan acompañadas de aire muy seco. La nube atraviesa el Atlántico antes de llegar al Caribe. ¿Cómo afecta nuestra salud y cómo podemos protegernos?
¿Cómo afecta la salud?
Los polvos suelen estar acompañados por bacterias, hongos y químicos que cruzan el camino. Además de afectar el medio ambiente y provocar calor, el polvo del Sahara suele causar complicaciones de salud en las personas con enfermedades respiratorias crónicas. Entre ellas, las más afectadas son las que padecen de asma, bronquitis, neumonía y rinitis. Las personas mayores, las embarazadas y los niños también suelen reflejar más los síntomas que el resto de la población. A estos ahora se les añade los que hayan pasado el coronavirus. Entre los síntomas que causa se encuentran:
- alergias
- irritación en los ojos o nariz
- cansancio
- tos y molestia en la garganta
- sensación de falta de aire o dificultad para respirar
¿Cómo protegernos de los polvos del Sahara?
- Evitar abrir puertas y ventanas en el hogar
- De tener que salir, hacerlo con mascarilla
- En caso de molestia en los ojos, enjuagar con agua
- Tomar los medicamentos que ayudan a mantener el padecimiento bajo control
- Permanecer la mayor cantidad de tiempo posible dentro de su casa
- Evitar hacer actividades al aire libre
- Mantenerse hidratado
- Se recomienda humedecer antes de limpiar alguna superficie para no alzar el polvo que pueda haber en el área
- Tapar los envases de agua o líquido para evitar que se contaminen
Estar al tanto del tiempo puede ayudar a prevenir que la salud empeore al prepararse de antemano para los polvos del Sahara.