Cuidar de la salud femenina sigue siendo un reto aún después de los 40 años, dado que no solo se avecina la menopausia, sino que también hay cambios hormonales y en varios órganos que podrían, si no se toman las medidas necesarias, desatar algunas anomalías y enfermedades.
Al pasar los años, el metabolismo empieza a cambiar, al punto que se vuelve más lento y, por ende, contribuye a serios cambios en la piel, los órganos y puede, incluso, afectar el sistema inmunológico, encargado de propender por la salud del ser humano.
Por todos estos riesgos es que, tan pronto llegues a la cuarta edad, debes empezar a ayudarle a tu organismo a preservarse de la mejor manera. La buena noticia es que con sencillos cambios en el estilo de vida lo lograrás.
La alimentación
Aunque suele cliché, una dieta baja en grasas trans y rica en frutas y verduras, será uno de tus principales aliados. Evita las bebidas con altos índices de azúcar y controla el consumo de dulces o comida conocida coloquialmente como chatarra.
En cambio de carnes rojas, sustituye esas proteínas por pescado azul e incluye en tu alimentación diaria el té verde, las fresas, las nueces, la soja, el yogur, el ajo, entre otros, que se ha demostrado traen grandes beneficios para la salud femenina.
El ejercicio
Sí, la actividad física también juega un rol determinante, especialmente, al llegar a los 40 años. No solo te ayudará a mantenerte activa, sino que contribuirá con el fortalecimiento de los músculos y los huesos para evitar la descalcificación. Además, evitarás la obesidad y el sobrepeso que se ha demostrado son dos de los principales causantes de anomalías en la salud como las enfermedades del corazón.
La sexualidad
Aunque el apetito sexual y el líbido suelen disminuir a los 40 años, hay varios estudios que demuestran que mantener relaciones sexuales frecuentes contribuye no solo con el estado de ánimo sino también con la salud en general.
En caso de que se disminuya el apetito sexual, consulta con tu médico tratante para encontrar maneras de aumentarlo; puede que encuentres métodos para mejorar con tu pareja o te prescriban medicamentos para esos fines.
La piel
Con el paso del tiempo, la dermis empieza a perder colágeno y está más expuesta a los rayos solares. Por eso, es indispensable que uses, como nunca, el bloqueador solar, cremas hidratantes, bebas mucha agua y aumentes el consumo de vitamina C que, de acuerdo con los dermatólogos, previene las manchas, las arrugas y otras imperfecciones.
La salud mental
A todas las edades es recomendable asistir al psicólogo, sin embargo, varios estudios han evidenciado que al llegar a esa edad la ansiedad, depresión y estrés empiezan a ser más comunes. Por eso, no te niegues la oportunidad de expresar lo que sientes en terapia.
Los controles médicos
En medio de la menopausia, los cambios hormonales suelen jugarle malas pasadas a las mujeres. Por eso, busca, con tu médico de cabecera, las alternativas para sentirte mejor y así gozar de tus años dorados de la mejor manera posible.