¿Sabías que aún existen muchas dudas de los beneficios de la dieta cetogénica, también conocida como keto? Aunque este plan de alimentación consiste en bajar los carbohidratos, hay algunas investigaciones que aseguran que aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Aunque esta dieta suele ser prescrita para las personas que quieren quemar calorías y grasa abdominal rápidamente, algunos estudios han evidenciado que podría aumentar el colesterol malo debido a que, en algunos casos, es rica en grasas, que incide drásticamente en esa situación.
El colesterol malo, de acuerdo con la literatura médica, podría ser responsable de que las arterias se tapen y se aumente el riesgo de infartos de miocardio y hasta accidentes cerebrovasculares.
Así lo evidenciaron científicos de la Clínica de Prevención del Programa Corazón Sano del Hospital St. Paul y del Centro de Innovación Corazón Pulmón de la Universidad de Columbia Británica en Vancouver, Canadá, que hicieron un estudio para saber cómo incidía ese modelo de alimentación en quienes lo implementan.
«Nuestro estudio halló que el consumo regular de una dieta baja en carbohidratos y alta en grasas se asociaba con mayores niveles de colesterol LDL -o colesterol «malo»- y un mayor riesgo de enfermedad cardíaca», expresó la autora principal del estudio, la Dra. Iulia Iatan.
La dieta cetogénica también se conoce como “dieta de triglicéridos de cadena larga” debido a que podría aportar al organismo de 3 a 4 gramos de grasa por cada gramo de carbohidratos y proteína.
El riesgo de este tipo de alimentación es que, como se sustituye azúcar, pan o pasta por grasa, el cuerpo pierde uno de sus considerados combustibles. Sin embargo, algunos expertos aseguran que esta rutina alimenticia podría tener algunos beneficios como la estabilización de la glucosa, adenosina, ácidos grasos poli-insaturados y más.
Inclusive, hay otros informes que aseguran que la dieta keto sí podría ser beneficiosa para el corazón porque, cuando el organismo se enfrenta a los procesos metabólicos, el sistema cardiovascular podría verse afectado, por lo que este mecanismo alimentario podría revertir los síntomas adversos.
Esta afirmación la hizo el profesor de Bioquímica y Biología Molecular Kyle S. McCommis, que lidera un estudio para determinar los beneficios de esa dieta, y cuya sede de investigación fue la Saint Louis University de EEUU. El equipo concluyó que disminuir el consumo de carbohidratos podría ser nocivo para la salud cardiovascular.
«Este estudio sugiere que consumir más grasas y menos carbohidratos puede suponer una intervención terapéutica nutricional para combatir la insuficiencia cardíaca», afirma McCommis, quien dio otros detalles de lo que esa dieta podría traer ya sea bueno o no.
«Tal y cómo ocurre con la ‘dieta keto’, el ayuno, cuando es prolongado, aumenta los requerimientos cardíacos de oxidación de ácidos grasos. El ayuno de 24 horas reduce los niveles de azúcar en sangre, y aumenta intensamente las concentraciones plasmáticas de los cuerpos cetónicos -encargados de la ‘quema’ de grasas para obtener energía- y de ácidos grasos no esterificados, el ‘combustible’ generado durante el proceso”, señalaron.