“Cualquier persona puede tener dermatitis atópica. Es más común en niños pero entre el 5 y 10 % de la población va a presentar la condición”, dice el doctor José González Chávez, dermatólogo sobre esta enfermedad que hace que la piel se seque, pique y se inflame. ¿Qué más debemos saber sobre la dermatitis atópica? Hoy en BeHealth te lo contamos.
¿Cuáles son los síntomas de la dermatitis atópica?
Los síntomas de la dermatitis atópica (eczema) pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo y varían considerablemente según la persona. Pueden incluir lo siguiente:
- Piel seca y agrietada.
- Picazón (prurito).
- Erupción en la piel hinchada que varía de color según el color de piel.
- Pequeñas protuberancias (en personas de piel morena o negra).
- Exudado y costras.
- Piel engrosada.
- Oscurecimiento de la piel alrededor de los ojos.
- Piel en carne viva y sensible por rascars
¿Por qué ocurre?
Esta afección genética provoca una inflamación en los linfocitos TH2, generando síntomas como picor y enrojecimiento, y afecta la función de la epidermis, la capa protectora de la piel. En palabras de la Dra. Damaris Torres, «la epidermis protege de los alérgenos que se encuentran en el ambiente, pero en los pacientes con dermatitis atópica, esa capa no genera la adecuada protección». Esto expone a los pacientes a alérgenos, causando sequedad en la piel y la aparición de síntomas.
¿Quiénes son más propensos a padecer esta condición?
La dermatitis atópica tiene una alta incidencia en niños y puede mejorar en la pubertad. Sin embargo, en casos que persisten hasta la edad adulta, se convierte en una condición crónica sin cura. Según la Dra. Paoli, un estudio demostró que en niños de 6 a 7 años, la prevalencia es del 24%, mientras que en la población general es del 2 al 4%.
En algunas personas, la dermatitis atópica está relacionada con una variación genética que afecta la capacidad de la piel de ofrecer protección. Con una capacidad de protección más débil, la piel no es capaz de retener la humedad y brindar protección contra bacterias, irritantes, alérgenos y factores medioambientales, como el humo del tabaco.
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¿Cómo afecta esta condición a los adultos?
Los adultos con dermatitis atópica pueden experimentar una disminución significativa en su calidad de vida, manifestada a través de síntomas como ojos irritados, dificultad para dormir y estigmas cutáneos.
¿Cuáles son las opciones de tratamiento?
El tratamiento se centra en mantener la piel hidratada, utilizando cremas emolientes, esteroides tópicos o inmunomoduladores en casos graves. También, se mencionan tratamientos con biológicos que inhiben la interleucina y reducen el picor. Sin embargo, estos pueden tener efectos secundarios, y su uso debe evaluarse en función del riesgo y el beneficio.
¿Qué factores pueden empeorar la condición?
Factores como el estrés, ciertos alimentos, cambios en la temperatura y la exposición al polvo y otros alérgenos ambientales pueden exacerbar los síntomas.
¿Qué recomendaciones se ofrecen para el manejo de la dermatitis atópica?
Se sugiere tomar baños con agua tibia o fría, hidratar la piel inmediatamente después del baño, usar detergentes sin fragancia y evitar el uso de suavizantes, asistir a las citas de seguimiento médico y tomar o aplicar los medicamentos recetados.
La Dra. Vylma Velázquez, alergista de adultos y niños, también destaca la importancia de mantener la piel bien hidratada para contrarrestar la pérdida de humedad y evitar ambientes calurosos. Además, recomienda evitar alérgenos conocidos y vigilar las reacciones cutáneas después de comer alimentos específicos.
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