El estrógeno se asocia al bienestar emocional de la mujer. Principalmente, la depresión y la ansiedad son los factores principales que afectan a las mujeres en sus años de producción con más frecuencia que a los hombres o las mujeres posmenopáusicas.
Esta hormona también se relaciona con las alteraciones de estado de ánimo que ocurren en las mujeres como el síndrome premenstrual, el trastorno disfórico premenstrual y la depresión posparto.
Leer más: Opciones para el manejo de síntomas de la menopausia
¿Qué es normal?
Cuando la mujer se encuentra en la pubertad, los ovarios comienzan a liberar estrógeno en cada ciclo menstrual. A mitad de ciclo, el nivel de estrógeno aumenta y desencadena la liberación de un óvulo para luego, caer con la misma rapidez. Durante el resto del mes, los niveles de esta hormona suben y bajan gradualmente.
Los niveles normales de estrógeno varían ampliamente. Las diferencias en la mujer se presentan durante el ciclo menstrual y se menciona que el nivel real de estrógeno no predice alteraciones emocionales.
El cerebro y sus hormonas
El estrógeno actúa en todas las partes del cuerpo, incluyendo el cerebro que controla las emociones.
Algunas funciones y efectos del estrógeno incluyen:
- Aumento de serotonina y cantidad de receptores de serotonina en el cerebro.
- Corrige la producción y los efectos de las endorfinas lo que hace que provoque que las sustancias químicas se sientan bien en el cerebro.
- Protege los nervios y estimula el crecimiento de los nervios.
Predecir los efectos del estrógeno en una mujer es complejo para que los investigadores comprendan por completo lo que sucede en sus cuerpos. A pesar de los efectos positivos que puede presentar esta hormona en el cerebro, se comenta que las mujeres mejoran el estado de ánimo una vez después de culminar la menopausia.
Síndrome de estrógeno premenstrual (PMS)
Un 90% de las mujeres experimentan síntomas antes de su período menstrual, así lo confirmó el medio de médicina. Si los síntomas son severos, se define como síndrome premenstrual y está presente cuando:
- Los síntomas físicos y emocionales se presentan de manera confiable días antes de que la fémina caiga en su ciclo menstrual.
- Los síntomas desaparecen luego de culminar el período.
- Los síntomas causan problemas personales en los trabajos, escuelas o en las relaciones.
- Ninguna condición, medicamento, droga o alcohol puede ser la culpa.
Los síntomas físicos más comunes son inflamación en los brazos y/o en las piernas, y sensibilidad en los senos. A nivel emocional, puede presentar tristeza, depresión, ira e irritabilidad, o tener ansiedad y retirarse de las personas. Según investigaciones realizadas por doctores del medio WebMD, se estima que entre el 20% y el 40% de las mujeres pueden presentar el síndrome premenstrual en algún momento de su vida.
Trastorno disfórico premenstrual (TDPM)
De igual forma en que las mujeres presentan síntomas y dolores al padecer del síndrome premenstrual, las mujeres con el trastorno disfórico premenstrual desarrollan síntomas de ánimo negativos antes de sus períodos. Algunos expertos consideran que este trastorno es la continuidad de forma grave del síndrome premenstrual.
Alrededor del 3% al 9% de las mujeres experimentan el trastorno disfórico premenstrual, desconociendo su razón debido a que los niveles de estrógeno casi siempre son normales.
Depresión posparto
Estar triste o presentar alguna aflicción luego del parto es tan común que se considera normal. Sin embargo, estudios realizados por parte de profesionales de la salud, estiman que entre el 10% y el 25% de las mujeres experimentan depresión dentro de los primeros seis meses luego del parto. Es inexplicable que luego del parto los niveles de estrógeno reduzcan hasta llegar a pensar que es el factor principal de la depresión, pero no se ha probado esa teoría. Para tratar esta depresión, se utilizan antidepresivos y/o las terapias.
Depresión perimenopáusica
Durante los meses o años previos a la menopausia (llamada perimenopausia), los niveles de estrógeno son impredecibles. Un 10% de las mujeres experimentan depresión durante la perimenopausia, lo que puede estar asociado a niveles inestables de estrógeno, según compartió el medio WebMD. También se reveló que el uso de un parche transdérmico de estrógeno puede mejorar la depresión durante este periodo, pero no es una práctica de atención estándar.
Depresión posmenopáusica
En la etapa de la menopausia, los niveles de estrógeno son muy bajos por lo que ingerir medicamentos con dicha hormona, no mejora la depresión en las mujeres. Luego de la menopausia, las tasas de depresión en las mujeres disminuyen y se vuelven similares a las de los hombres de la misma edad.
Fuente: WebMD
Te puede interesar: Alerta a la mujer sobre el síndrome genitourinario en la menopausia