El cáncer cervical, una enfermedad que afecta a miles de mujeres en todo el mundo, sigue siendo un desafío significativo para la salud pública. «Su causa principal es el virus del papiloma humano, que se aloja en las paredes del epitelio cervical, causando una infección crónica en algunos pacientes», señala el Dr. Joel López, Hematólogo – Oncólogo y Presidente de la Asociación de Hematología y Oncología Médica de Puerto Rico.
Esta infección, como explica López, puede ser temporal para la mayoría, pero en algunos casos, el virus persiste, desencadenando una serie de eventos que pueden conducir al desarrollo de cáncer cervical. Según él, «Con el paso de los años, esta persistencia del virus conduce a cambios genéticos que eventualmente pueden hacer que las células se vuelvan inmortales, lo que resulta en un crecimiento tumoral y, finalmente, en cáncer cervical».
El cáncer cervical se desarrolla a lo largo de un proceso que involucra cambios genéticos progresivos en las células infectadas por el virus del papiloma humano. López explica: «El proceso de formación del tumor cervical implica que, a lo largo de los años, las células infectadas experimenten cambios genéticos que les permiten crecer de manera descontrolada y evitar la muerte celular programada».
¿Qué factores influyen?
Además del virus del papiloma humano, hay una serie de factores de riesgo que influyen en la progresión del cáncer cervical. López enfatiza: «Es crucial destacar que aproximadamente el 99% de los casos de cáncer cervical están directamente relacionados con la infección por este virus«. Sin embargo, también hay otros factores, como el comportamiento sexual y los hábitos de estilo de vida, que pueden aumentar la probabilidad de contraer la infección y, por ende, el riesgo de desarrollar cáncer cervical.
El médico hace hincapié en la importancia de comprender los factores de riesgo modificables y no modificables. Según él, «entre los factores de riesgo que no podemos modificar están nuestro historial familiar y nuestra raza, aspectos biológicos con los que nacemos y que son inmodificables». Sin embargo, factores como el consumo de alcohol, la dieta, el tabaquismo y el estrés son modificables y pueden reducir el riesgo de cáncer cervical.
Te puede interesar: Desmitificando el virus del papiloma humano (VPH): perspectivas y prevención
Cáncer cervical en Puerto Rico
En cuanto a la prevalencia del cáncer cervical en Puerto Rico, López señala un aumento preocupante en los últimos años. «Un estudio realizado entre 2001 y 2017 reveló que la incidencia pasó de aproximadamente nueve casos por cada 100,000 habitantes a alrededor de 13 casos por cada 100,000 habitantes», explica. Además, la interrupción de los controles médicos habituales durante la pandemia podría contribuir a un aumento adicional en los próximos años, especialmente entre las mujeres infectadas con el virus del papiloma humano.
Para la detección temprana del cáncer cervical, el Dr. López destaca la importancia de las pruebas realizadas por ginecólogos, como el Papanicolaou y la prueba del VPH. «Estos seguimientos son altamente personalizados, dependiendo de la edad y los factores de riesgo del paciente», dice. Además, recomienda que las mujeres consideren la vacunación contra el VPH como una medida preventiva adicional.
El tratamiento y la identificación del estadio de la enfermedad son fundamentales para determinar el pronóstico y la calidad de vida del paciente. López explica: «El estadio de la enfermedad se refiere a cuán avanzada está la enfermedad y dónde se encuentra localizada.» Además, destaca el papel de las terapias dirigidas en el tratamiento del cáncer cervical, que pueden mejorar la calidad de vida al tener menos efectos secundarios.
Finalmente, el Dr. López ofrece un mensaje de esperanza y aliento para aquellos que luchan contra el cáncer cervical. «Existen tratamientos disponibles, incluyendo algunos nuevos y novedosos, que tienen menos efectos secundarios y ofrecen una buena calidad de vida», dice. Aunque la cura completa no siempre es posible, los profesionales de la salud están comprometidos a proporcionar un tratamiento que permita una vida digna y prolongada.
Lee más: Virus del papiloma humano (VPH) en Puerto Rico, ¿qué debemos saber?