Para muchas personas descansar sobre la espalda es una forma placentera de dormir y quizás la única alternativa para conciliar el sueño.
En el caso de las embarazadas, surge la duda de si esta es una buena posición para dormir, y es que aunque en el primer trimestre no notaras un cambio significativo en tu peso y podrás dormir así, las cosas cambiarán en el segundo trimestre, por lo que es mejor acostumbrarte cuanto antes a una nueva posición.
¿Puede ser peligrosa está posición durante la gestación?
Descansar sobre la espalda ocasiona una presión del utero sobre la vena encargada enviar la sangre de la parte inferior del cuerpo hacia el corazón.
Cuando esto ocurre, es posible que te sientas mareada o en casos más extremos, está posición podría dificultar el adecuado flujo sanguíneo ocasionando que los nutrientes y la sangre no lleguen de la forma esperada a la placenta.
La situación es más compleja para aquellas mamás que sufren problemas de salud como alta presión o diabetes, ya que interfieren en la cantidad de oxígeno que está recibiendo el bebé en desarrollo.
Permanecer demasiado tiempo en esta posición puede generar:
- Dolores musculares
- Ronquidos
- Hemorroides
- Apnea del sueño
- Mareos al sentarte o ponerte de pie, debido a la baja tensión arterial.
¿Cuál es la posición recomendada?
Si bien dormir sobre la espalda representa ciertos riesgos, con el paso de los días y el aumento en el tamaño de la barriga también impedirán que duermas boca abajo (esto también puede lastimar al bebé).
En este caso podrás descansar de lado e intercambiar tu posición regularmente para no tener dolor muscular.
Expertos aconsejan descansar la mayor cantidad de tiempo sobre el costado izquierdo pues se ha evidenciado que esto favorece el adecuado flujo de sangre y facilita la recepción de nutrientes por parte del bebé.
Otra alternativa puede ser la de apoyarte sobre almohadas alcanzando una posición casi sentada. Resulta ideal para las futuras mamás que sienten problemas con su respiración o que sienten acidez.
Recomendaciones para un buen descanso:
- Limita el consumo de cafeína y dulces especialmente al finalizar la tarde o en la noche.
- No consumas tanto líquido antes de ir a la cama, tendrás que ir al baño muchas veces.
- Evita las comidas picantes o porciones muy grandes ya que esto puede ocasionar problemas de acidez.
- Puedes ubicar una almohada entre tus piernas ayudando a disminuir la presión de la espalda baja.
Con información Baby Center