La artritis reumatoide es una artritis inflamatoria en la que las articulaciones, generalmente las de las manos y los pies, se inflaman, lo que provoca hinchazón, dolor y a menudo destrucción de la articulación.
El diagnóstico temprano y la introducción oportuna de medicamentos que puedan reducir los daños articulares irreversibles son importantes para un buen tratamiento. El enfoque tradicional del tratamiento de los pacientes con artritis reumatoide se ha basado hasta ahora en la utilización de diversos enfoques terapéuticos según una estrategia gradual. Pero, ¿qué debemos saber sobre los efectos secundarios del tratamiento?
Tratamiento para la artritis reumatoide
A pesar de que no hay una cura conocida para la AR, hay tratamientos altamente efectivos. El tratamiento temprano es esencial para prevenir el daño que la AR puede causar. Después del diagnóstico, es esencial comenzar el tratamiento inmediatamente.
Los métodos de tratamiento, incluidos los medicamentos y los cambios de estilo de vida, se centran en aliviar el dolor, reducir la inflamación, detener o retrasar el daño articular y mejorar la salud general.
Los medicamentos utilizados para tratar la AR se dividen en dos grupos: los sintomáticos y los modificadores de la enfermedad. Los medicamentos sintomáticos, o aquellos diseñados para aliviar los síntomas, incluyen AINEs (medicamentos antiinflamatorios no esteroideos), aspirina, analgésicos (medicamentos para el dolor) y corticoesteroides.
Entre los medicamentos que modifican la enfermedad, o los que potencialmente la modifican, figuran el metotrexato, la sulfasalazina, la leflunomida y los modificadores de la respuesta biológica (agentes biológicos).
El programa de tratamiento debe adaptarse a sus necesidades, teniendo en cuenta la gravedad de su artritis, otras condiciones de salud que pueda tener y su estilo de vida. Su reumatólogo y otros miembros de su equipo de atención médica trabajarán con usted y entre ellos para determinar el mejor plan de tratamiento.
Efectos secundarios del tratamiento: impacto en el organismo
De la misma manera que con cualquier otro medicamento, es posible que notes efectos adversos al tomar la medicación para tratar la AR. Para reducir el riesgo de efectos secundarios de los medicamentos recetados, tu médico debe recetarte la dosis más baja del medicamento que te funcione. Informa a tu médico sobre cualquier problema de salud o medicamentos que ya estés tomando. Esto incluye mencionar cualquier vitamina, suplemento o medicamento de venta libre que estés consumiendo, como la aspirina.
Es importante recordar que algunos problemas posiblemente graves solo se pueden identificar a través de pruebas de laboratorio regulares prescritas por el médico. Si observas efectos adversos graves en la medicación, tu médico quizás decida interrumpirla. Comenzar o detener el medicamento solamente según las indicaciones de tu médico. Hacerlo solo puede tener consecuencias perjudiciales para tu salud.
Los siguientes son algunos de los efectos secundarios adversos más comunes del tratamiento de la AR. Los riesgos son organizados por la parte del cuerpo afectada y se muestran ejemplos de medicamentos que pueden causar estos posibles efectos secundarios.
Ojos
Los corticosteroides como la prednisona pueden causar glaucoma, un grupo de enfermedades que causan daño al nervio óptico, y cataratas (nubosidad del cristalino que interfiere con la visión).
La hidroxicloroquina (Planequil) puede en raros casos producir cambios de pigmentación en la mácula, la parte central de la retina del ojo responsable de la visión, lo que da lugar a la pérdida de la misma.
Riñones
Normalmente, los riñones no se ven afectados por la AR. Sin embargo, en algunas personas con AR, la baja función renal es un efecto secundario de los medicamentos que toman para su enfermedad. Los medicamentos como la ciclosporina (Neoral) o algunos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) como el ibuprofeno o el naproxeno pueden dañar los riñones.
Pulmones
El metotrexato, un fármaco comúnmente utilizado para la AR, puede a veces causar efectos secundarios en el pulmón. Estos efectos suelen desaparecer cuando se suspende el medicamento. A veces el metotrexato causa dificultades respiratorias, conocidas como neumonía inducida por el metotrexato o daño pulmonar. El oro inyectable y la penicilamina también pueden causar una neumonía similar inducida por medicamentos.
Boca
El metotrexato y el oro inyectable a veces causan sequedad de boca o llagas orales. Para ayudar a aliviar estos efectos negativos, intente lo siguiente:
- Mójate la boca con un chicle o un caramelo sin azúcar o bebiendo cubitos de hielo.
- Prueba con sustitutos de la saliva como Salivart, Xerolube o Glandosan.
- . Evite el alcohol o los antisépticos orales que contengan alcohol y que resequen aún más la boca.
- Trata de no comer alimentos salados o picantes o cítricos que irriten las llagas.
- Prueba con analgésicos tópicos como Oragel o Zilactin, o pida a su médico o dentista que le recete un enjuague bucal para ayudar a curar las llagas.
Piel
Los medicamentos para la artritis, como los corticoides y los AINEs, pueden tener efectos adversos en la piel. Los corticosteroides pueden hacer la piel más delgada y más susceptible a las lesiones. Los que toman AINEs también son más propensos a sufrir lesiones.
Estómago
No es raro que varios AINE y fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (FARME), causen dolores estomacales, náusea o en algunos casos, úlceras.
Habla con tu doctor sobre lo que puede hacer para aliviar estos efectos secundarios, como tomar las medicinas con las comidas, si es posible, o tomar los AINE con otro medicamento que reduzca el ácido estomacal o cambiar de administración oral a inyección.