Dra. Gloria San Miguel Escritora y coach
En muchos casos, el amor maternal puede venir en formas inesperadas, como a través del cuidado y la crianza de una abuela. Aunque no fue mi madre biológica quien me crió, fue mi querida abuela quien desempeñó ese papel crucial en mi vida, dejando una huella indeleble en mi corazón y mi camino.
Recuerdo con cariño los días llenos de risas y aprendizaje que pasé junto a mi abuela. Desde mi más tierna infancia, ella estuvo allí para cuidarme, consolarme y enseñarme con sabiduría acumulada a lo largo de los años. Su amor era palpable en cada comida preparada con esmero, en cada historia contada con ternura y en cada abrazo reconfortante.
Aunque no me cargo en su vientre, el vínculo que tenemos es tan fuerte como cualquier otro. Mi abuela no solo me enseñó lecciones prácticas de la vida, sino que también modeló valores como la paciencia, la compasión y la perseverancia. Su presencia constante y su apoyo inquebrantable fueron el ancla que me ayudó a navegar por las aguas turbulentas de la vida.
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Los estudios sobre el papel de los cuidadores no biológicos, como las abuelas, en la crianza de los niños también respaldan la importancia de su influencia en el desarrollo de los niños. La figura de la abuela puede proporcionar un sentido de continuidad, estabilidad y seguridad en la vida de un niño, especialmente en situaciones donde la madre biológica no puede estar presente o es incapaz de cuidar.
Mi historia personal es solo una entre muchas que destacan el amor y el impacto positivo que las abuelas pueden tener en nuestras vidas. A través de su sacrificio, dedicación y amor incondicional, las abuelas desempeñan un papel vital en la formación de las personas que llegamos a ser.
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En última instancia, independientemente de quién desempeñe el papel de madre en nuestras vidas, ya sea biológica, adoptiva o una figura materna no tradicional como una abuela, lo que importa es el amor, el cuidado y la orientación que recibimos. Estemos agradecidos por el amor maternal en todas sus formas, ya que deja una marca indeleble en nuestros corazones y vidas.