El bebé está en la capacidad de realizar pequeños movimientos desde la semana siete u ocho de gestación, sin embargo, aproximadamente entre las semanas 16 y 22 lograrás sentir sus movimientos.
Si ya te han realizado alguna ecografía o ultrasonido, seguramente te habrás enamorado mientras se desliza, gira o lleva sus manos a la boca, esto incluso sin que tu puedas siquiera pensar que justo en ese momento lo está haciendo.
Algunas madres creen que sentir a bebé es un poco más difícil para las mamás primerizas, quienes ya han tenido un bebé perciben los movimientos con mayor facilidad.
Para que sea más fácil distinguir esos primeros movimientos, dedica unos minutos, especialmente en horas de la tarde-noche para acostarte y descansar, quizás ahí logres sentirlo.
Esas primeras pataditas o los golpes con los codos podrán confundirse con facilidad con un movimiento intestinal o con un estómago pidiendo algo de comer, pero tranquila, pronto aprenderás a diferenciarlas muy bien.
Tu pareja tendrá que tener un poco más de paciencia pues seguramente cuando tú quieras mostrarle, el bebé ya no querrá moverse, ¡dulcemente traviesos desde el vientre!
¿Cómo saber que se está moviendo?
Sencillamente sabes que estás sintiendo algo no muy común, algunas lo comparan con una especie de palomitas de maíz reventando o movimientos similares a los de la digestión.
Poco a poco se irán haciendo más fuertes y tu instinto de mamá te dirá que es tu bebé.
¿Con qué frecuencia aparecen los movimientos?
Para los primeros meses, las pataditas aparecerán de forma esporádica, quizás no porque tu bebé no se esté moviendo sino porque no aprenderás aún a identificarlos.
Para el segundo trimestre del embarazo, estos movimientos serán más intensos y regulares, y te darán la certeza de que todo marcha bien.
Es importante que sepas que no todos los embarazos son iguales, por lo que no necesariamente debe moverse tu bebé en una semana en particular.
Lo que sí es importante, es que una vez notes en tu pequeño un nivel de actividad normal, validez que ésta no disminuya o se ausente por completo.
¿Es normal que el bebé se mueva menos hacia finales del embarazo?
No. Debe ocurrir todo lo contrario, entre más avanza el embarazo, más grande y desarrollado está tu bebé, por lo que sus movimientos son más notorios e incluso para las últimas semanas sobresalen algunas partes de su cuerpo cuando se mueve.
Tu bebé cuenta con menos espacio para moverse por lo que si no sientes los movimientos de tu bebé, es importante que acudas al médico para una revisión.
Si todo está bien tu médico podrá indicarte cuáles son las señales de alarma y cómo detectar que tu bebé está bien.
Puedes hacer un seguimiento a sus movimientos
Una vez empieces a sentir las pataditas del bebé con regularidad, fíjate en su frecuencia y avisa inmediatamente a tu doctor si notas una menor cantidad de movimientos.
Una reducción en la actividad del bebé podría indicar algún problema en el adecuado desarrollo del embarazo, por lo que es fundamental una revisión.
Es probable que se practique un ultrasonido para medir el nivel de líquido amniótico y verificar el bienestar del bebé.
Ideas para llevar un control:
- Presta atención a la hora del día en la que está muy activo
- Siéntate o acuéstate de costado en un lugar tranquilo para que no te distraigas y disfruta sus movimientos.
- Anota el tiempo que tardas en sentir diez movimientos, que pueden ser pataditas, espasmos, sacudidas, volteos o cualquier otra clase de movimiento concreto.
En caso de que no percibas muchos movimientos en un término de una hora, te recomendamos consultar, esperando que todo esté en orden.
Algunas mamás comen algo de dulce o consumen alguna bebida fría para estimular al bebé y hacer que se mueva.
Con información babycenter