La enfermedad psoriásica, que afecta principalmente la piel, también está estrechamente vinculada con diversas enfermedades reumatológicas, especialmente a través de la artritis psoriásica. Esta condición inflamatoria afecta las articulaciones de manera compleja y en múltiples subtipos, y es una de las manifestaciones reumatológicas más comunes asociadas a la psoriasis.
La artritis psoriásica se manifiesta en distintos factores, cada uno con un perfil clínico y nivel de severidad propios, así lo explica el Dr. José Rodríguez Santiago, reumatólogo, quien señala además algunos subtipos de esta artritis incluyen oligoartritis una la forma más común y que afecta un número limitado de articulaciones de manera asimétrica y se presenta en alrededor del 70% de los pacientes.
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Asimismo, explicó que puede reflejarse la poliartritis que es similar a la artritis reumatoide, este tipo afecta múltiples articulaciones y ocurre en el 15% de los casos. Unas de las más preocupante es la artritis mutilante haciendo parte de la manifestación más severa, que produce destrucción articular y deformidades, lo que la convierte en una de las formas más devastadoras de esta enfermedad.
Como señala el Dr. Rodríguez Santiago, “la artritis mutilante afecta aproximadamente al 5% de los pacientes con esta enfermedad”.
Finalmente explicó sobre la espondiloartritis, que afecta principalmente la columna vertebral y ocurre en un 5% de los pacientes de forma aislada, aunque puede coexistir con otros subtipos en aproximadamente el 40% de los casos.
Comorbilidades
Existen fuertes vínculos genéticos entre la psoriasis y su manifestación articular, lo cual predispone a ciertos individuos a desarrollar tanto síntomas cutáneos como reumatológicos. Adicionalmente, quienes viven con artritis psoriásica enfrentan una alta incidencia de comorbilidades, como enfermedades inflamatorias intestinales (incluyendo el Crohn y la colitis ulcerosa), osteoporosis, hipertensión y enfermedades cardiovasculares. Estas comorbilidades complican el manejo de la enfermedad, aumentando la carga en la salud general del paciente.
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A diferencia de la artritis reumatoide, la artritis psoriásica es “cero negativa”, lo que significa que no presenta el factor reumatoide en los análisis. Esta diferencia es fundamental para orientar un tratamiento adecuado, considerando la gran variedad de manifestaciones y la severidad de los subtipos.
El Dr. Rodríguez Santiago enfatiza que, “la artritis mutilante afecta aproximadamente al 5% de los pacientes con esta enfermedad”, destacando la importancia de identificar estos casos graves de manera temprana para limitar el daño articular y mejorar la calidad de vida del paciente.