El diagnóstico temprano se ha convertido en el principio rector del tratamiento de la esquizofrenia. Cuanto antes se inicie este, mejor será el resultado.
Para los pacientes esquizofrénicos, el pronóstico depende en gran medida de la adherencia al tratamiento farmacológico. Sin ello, el 70-80% de los individuos experimentarán otro episodio en el primer año del diagnóstico. La continuidad de la medicación puede reducir este porcentaje a cerca del 30% y disminuir significativamente la gravedad de los síntomas en la mayoría de los sujetos.
Tras el alta hospitalaria, las personas que no toman la medicación prescrita tienen muchas probabilidades de volver a ser hospitalizadas en el plazo de un año. Tomar los medicamentos según las indicaciones reduce en gran medida la posibilidad de rehospitalización.
A pesar de los beneficios demostrados del tratamiento farmacológico, la mitad de las personas con esquizofrenia no toman los medicamentos prescritos. Algunos no reconocen su enfermedad y muestran resistencia a tomar los fármacos. Otros dejan de ingerirlos debido a los desagradables efectos secundarios. En otros casos, el hecho de no tomar la medicación se debe a problemas de memoria, desorganización o simplemente falta de dinero.
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Es más probable que la adherencia mejore si se abordan algunas barreras específicas. Si los efectos secundarios son un problema importante, puede ser útil cambiar el tratamiento farmacológico. Una relación de confianza con un médico u otro profesional puede ayudar a algunas personas con esquizofrenia a aceptar más fácilmente su enfermedad y a reconocer la necesidad de seguir el tratamiento prescrito.
De acuerdo a diversos estudios, los factores asociados a un mejor pronóstico son:
- Edad avanzada en el momento de la aparición de los síntomas
- Aparición repentina de los síntomas
- Ligero déficit cognitivo
- Un buen nivel de habilidades y capacidades antes de la aparición de la enfermedad
- Presencia de pocos síntomas negativos, por ejemplo, reducción de la expresión de las emociones
- Periodo más corto entre el primer episodio psicótico y el tratamiento
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En cambio los factores asociados a un pronóstico poco favorable son los siguientes:
- Edad temprana en el momento de la aparición de los síntomas
- Problemas funcionales en situaciones sociales y laborales anteriores a la enfermedad
- Antecedentes familiares de esquizofrenia
- Presencia de muchos síntomas negativos
- Periodo más largo entre el primer episodio psicótico y el tratamiento
- Los hombres tienen peor pronóstico que las mujeres, pues estas responden mejor al tratamiento con fármacos antipsicóticos