La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria que se presenta mediante el picor y el enrojecimiento. La condición es uno de los eccemas más comunes en la piel, pero ¿cuáles son sus factores de riesgo?
La enfermedad surge, en su mayoría, en niños, y es una condición que se ve afectada por el sistema inmunológico del paciente, siendo la genética una de las razones principales del padecimiento. Para controlar la condición, la piel necesita ser humectada constantemente, pero es distinto para todos los pacientes.
“No hay ningún paciente igual, todo el mundo es diferente”, expresó la dermatóloga Eneida De La Torre Lugo en entrevista con BeHealth.
Cada paciente tiene un factor que causa que se exacerbe su dermatitis, es por eso importante la necesidad de reconocerlo. El primer paso es saber el historial familiar, incluyendo si alguien padece de asma o rinitis alérgica.
Factores de riesgo
Desde alimentos como nueces hasta la ropa o, incluso, sábanas de la cama pueden ser desencadenantes. También se debe tener como posibilidad la caspa de animales, el moho, el hongo y el cambio de temperatura.
Los factores de riesgo están atados a la tríada atópica que incluye el asma y las alergias nasales, ya que tienen el medio ambiente como detonador común.
“Como es una condición que tiene que ver mucho con el sistema inmunológico y el ambiente, el ambiente es lo que hace que el cuerpo manifieste la condición”, explicó De La Torre.
Asimismo, los cambios de temperatura pueden afectar la piel. De estar muy caliente, el sudor puede provocar la condición en la piel, mientras que el frío causa resequedad. Es importante mencionar que el estrés también es catalogado como un posible factor.
Debido a la situación de Covid-19 y la necesidad de utilizar desinfectantes y alcohol constantemente, los pacientes con dermatitis atópica se han visto afectados.
La dermatóloga recomienda visitar sus médicos para recibir tratamiento, y humectar las manos tan pronto utilicen desinfectante.