La osteoporosis, la enfermedad crónica que altera la estructura ósea y crea una consecuente reducción de la resistencia a la «carga mecánica», aumentando el riesgo de fracturas.
Las mujeres en particular la padecen porque la osteoporosis también está vinculada a la menopausia y a la disminución de estrógenos, que son fundamentales para los huesos ya que son los principales «actores» de la absorción de calcio.
Entre los factores que ayudan a prevenir esta patología están también el correr y la nutrición.
Las señales de alarma
La osteoporosis se llama la enfermedad silenciosa, porque solo da señales cuando está avanzada. Los pacientes a menudo experimentan los síntomas muy tarde. Algunos pacientes vienen directamente a tener microfracturas, una disminución de la estatura, colapsos vertebrales, estos son desafortunadamente síntomas tardíos. Por eso es importante la prevención.
Diagnóstico
Para llegar a un diagnóstico, dado que la osteoporosis es asintomática, el examen de referencia es la MOC (Mineralometría Ósea Computarizada), un examen radiológico que evalúa la densidad ósea y se realiza a nivel femoral o lumbar.
También está el MOC de ultrasonido, por lo tanto sin radiación, que tiene la misma fiabilidad.
La osteoporosis y la nutrición, combatiéndola en la mesa
Si se quiere prevenir la osteoporosis en la mesa, es fundamental tener una dieta equilibrada en la que aportemos todos los macronutrientes, (hidratos de carbono, proteínas y grasas) para evitar entrar en un estado de desnutrición.
Entonces no debe haber una falta diaria de alimentos que contengan nutrientes que promuevan la absorción del calcio: vitamina D, K y C y sales minerales (calcio, magnesio y fósforo) que fortalecen los huesos.
Acogemos con agrado los productos lácteos, los frutos secos todos los días, los huevos, el pescado (anchoas, sardinas, caballa, también rico en omega 3), pero también las verduras como la rúcula, el brócoli y las legumbres, también ricas en calcio.
También hay alimentos que reducen la absorción de calcio si se toman en exceso: la sal en particular, el café y el alcohol (se recomienda un consumo moderado, un vaso de vino al día para las mujeres y un máximo de 2 para los hombres).
Como en todo, se necesita equilibrio. Por último, no podemos dejar de mencionar el tabaquismo, que es un factor de riesgo no solo para las patologías cardiovasculares y los tumores, sino también para la osteoporosis, ya que impide la absorción del calcio, un mineral fundamental para la estructura ósea.
Osteoporosis, prevenirla a través de los deportes
Podría parecer una contradicción asociar la osteoporosis, una enfermedad que afecta a los huesos y las articulaciones, con la actividad física. No es así. A través de los deportes es posible prevenir y curar en parte esta patología degenerativa que afecta a los huesos.
Es, de hecho, correr, caminar y levantar pequeños pesos que determinan una tensión en las células del hueso que se encargan de depositar el calcio en los huesos y hacerlos más fuertes.
En ausencia de gravedad, de hecho, el esqueleto está sujeto a diferentes tensiones. Este es el caso, por ejemplo, de los astronautas que a menudo se ven afectados por la osteoporosis: su cuerpo, al no tener que contrarrestar la fuerza de gravedad, permanece «inactivo» y el calcio no puede depositarse en los huesos, que se vuelven entonces más delgados y débiles.
Pero quien ya sufre de osteoporosis, ¿puede realmente hacer deporte? Obviamente cada historia clínica está separada, pero correr despacio, caminar y pesas pequeñas pueden ayudar a aumentar la resistencia de los huesos. El deporte ayuda a prevenir la degeneración de los huesos.