En la dermatitis atópica, el picor intenso es uno de los principales y constantes síntomas. Comienza cuando la piel se inflama y se vuelve pruriginosa. Los pacientes tienden a rascarse para aliviar el picor, lo que provoca un daño adicional en la barrera cutánea.
Asociaciones como la National Eczema Association (NEA), American Academy of Dermatology y la Organización Mundial de la Salud, indican que este daño permite que más alérgenos e irritantes penetren en la piel, lo que a su vez aumenta la inflamación y el picor, perpetuando el ciclo. Este fenómeno no solo empeora la condición de la piel, sino que también impacta negativamente en la calidad de vida del paciente, afectando el sueño, el rendimiento escolar o laboral, y la salud mental.
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Fases del picor
Expertos de Mayo Clinic indican que existen varios tipos de picor asociados con la dermatitis atópica, los cuales pueden aumentar de acuerdo al desarrollo de la enfermedad.
- Picor agudo: Es intenso y de corta duración que generalmente se produce en respuesta a un brote activo de dermatitis.
- Picor crónico: Es constante y persistente, incluso en períodos en los que la dermatitis atópica no está en su fase más activa.
- Picor nocturno: Se intensifica durante la noche, interrumpiendo el sueño y afectando la recuperación de la piel.
Para interrumpir el ciclo del picor en la dermatitis atópica, se sugieren varias estrategias prácticas:
- Hidratación adecuada: Utilizar emolientes y cremas hidratantes para mantener la piel hidratada y reforzar la barrera cutánea. Expertos indican que aplicar estos productos inmediatamente después del baño ayudan a su efecto.
- Baños y duchas: Optar por baños cortos y tibios, evitando el agua caliente, que puede deshidratar la piel. Añadir avena coloidal al baño puede ayudar a aliviar el picor.
- Medicamentos tópicos: Aplicar corticosteroides tópicos y otros medicamentos antiinflamatorios según lo prescrito por el dermatólogo para reducir la inflamación y el picor.
- Ropa adecuada: Usar ropa de algodón y evitar tejidos sintéticos y lana, que pueden irritar la piel. También es importante lavar la ropa con detergentes suaves y sin fragancias.
- Evitar desencadenantes: Identificar y evitar alérgenos y factores irritantes que puedan empeorar la dermatitis atópica, como ciertos alimentos, polvo, polen, y productos de higiene con fragancias fuertes.
- Técnicas de control del picor: Practicar métodos para resistir la necesidad de rascarse, como el uso de guantes de algodón por la noche y mantener las uñas cortas. Además, técnicas de mindfulness y relajación pueden ser beneficiosas para manejar el estrés y la ansiedad, que a menudo agravan el picor.
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