Las personas con fibromialgia, condición que causa un dolor corporal constante, suelen tener puntos sensibles en el cuerpo que con un simple toque provocan dolor y, al momento de tener relaciones sexuales, puede ser incómodo y doloroso.
La fibromialgia suele presentarse mayormente en las mujeres, situación que afecta el área de la sexualidad, pero no la hace imposible. Sin embargo, muchos pacientes han compartido cómo la condición disminuye el deseo sexual, además de afectar psicológicamente a la persona.
El dolor corporal y la fatiga crónica dificultan el placer, lo que puede culminar entre problemas de pareja. Es por esto que se recalca la comunicación y comprensión mutua. Llegar a ciertos acuerdos permite el disfrute de una manera efectiva como posponer el encuentro sexual para cuando haya menos dolor físico.
Los doctores recomiendan ejercitarse para crear condición física y lograr que todo tipo de actividad sea menos dolorosa para el paciente. Practicar técnicas de estiramiento pueden servir para disminuir el dolor. De igual forma, visitar un psicólogo para hablar sobre las complicaciones, tanto personales como de pareja, puede ser beneficioso.
Entre encuestas y estudios hechos anteriormente, los pacientes han compartido que el aumentar las muestras de cariño han mejorado la relación de pareja. Asimismo, la condición en el paciente requiere un aumento de sensibilidad, delicadeza, y explorar otras formas de placer que funcionen para ambas partes.
Cada persona y su situación es distinta por lo que una comunicación efectiva y el intentar distintas formas de llevar el encuentro a cabo podrían permitir un mayor disfrute.