La enfermedad intestinal inflamatoria (EII) presenta diferentes síntomas que pueden ir en algunos casos de leves a severos, afectando las actividades del diario vivir de las personas.
Entre los signos comunes de la enfermedad de Crohn y la Colitis Ulcerosa, condiciones que se destacan entre las EII, se presentan la diarrea, la fatiga, el dolor y los cólicos abdominales, la presencia de sangre en las heces y la pérdida de peso involuntaria.
Comprendiendo esto y entendiendo que los síntomas pueden presentarse de un momento a otro sin previo aviso, los pacientes con diagnóstico de EII deben preparar un itinerario antes de realizar un viaje, ya sea por motivo de vacaciones o por algún asunto personal o laboral.
En BeHealth tenemos algunas recomendaciones para que no dejes pasar ningún detalle y para que puedas disfrutar de un tiempo de comodidad y bienestar.
No olvides que un viaje puede traer modificaciones en la rutinas y con estos cambios, pueden presentarse algunas situaciones de estrés en las que los síntomas pueden empeorar, con el fin de evitar eso, sigue las siguientes recomendaciones:
1. Habla con tu especialista antes del viaje
Es importante que sepas que aunque existen muchos pacientes con condiciones de EII, no todos los casos son iguales por lo que se recomienda que antes de realizar el viaje el paciente pueda consultar con su médico sobre su lugar de destino, la duración del viaje y la fecha estimada del mismo, para que el profesional de la salud pueda realizar algunas sugerencias en cuanto a su tratamiento.
Es importante además que se cuente con una buena cantidad de medicamentos y que se planteen diferentes opciones para reaccionar frente a cualquier situación que pueda generar la enfermedad mientras está fuera de casa.
2. Elige un destino amigable
Como pacientes ya debes saber que algunos factores pueden influir en la exacerbación de los síntomas, por lo que antes de elegir tu lugar de destino es fundamental que este lugar cuente con condiciones sanitarias adecuadas, en donde la comida y las bebidas se preparan de forma higiénica o donde tú mismo lo puedas preparar para no tener problemas de salud.
3. Ubica puntos de atención médica
Una vez elegido el lugar para el viaje es importante que encuentres tu hotel y desde ahí, ubiques los puntos de atención médica que estén más cerca de ti, indaga cómo llegar a ellos, qué transporte puedes utilizar o cuál es el camino más rápido, cuáles son las opciones de especialidades que ofrecen y asegúrate de contar con un seguro que te cubra mientras estés en este lugar.
4. Listado de medicamentos
El estrés es un factor que puede empeorar los síntomas de la condición, por lo que planificar todo con tiempo puede ayudarte a disfrutar mejor de tus vacaciones.
Lleva siempre contigo una agenda en la que tengas anotados todos tus medicamentos, las horas en las que debes hacer las tomas y las dosis que requieres.
Organiza toda tu maleta y deja un espacio especial para esos medicamentos y para tu agenda, si ves que puedes llevarla en tu maleta de mano, será mucho mejor pues no corres el riesgo de perderla.
5. Prevé paradas en el camino
Si el viaje lo vas a realizar por tierra, piensa en la posibilidad de hacer paradas en puntos específicos para que puedas utilizar el baño.
Puedes planificar horas para las comidas mientras accedes a estaciones de servicio, así mientras recargas gasolina en tu carro puedes descansar y hacer tus necesidades.
6. Medicamentos a la mano y de sobra
Como mencionamos, es importante que lleves una mochila de mano en donde incluyas tu informe médico en el que indique tu nombre, enfermedad, la medición de tus medicamentos y forma de contactar a tu profesional tratante. Además, estos medicamentos deben llevarse siempre contigo con una pequeña botella de agua para que puedas hacer las tomas en los tiempos exactos.
No olvides llevar las cantidades necesarias e incluso unas extras por si decides permanecer un tiempo más fuera de casa.
7. Cuida tu alimentación
Cuando sales de viaje hay dificultad para llevar y preparar tus propios alimentos, sin embargo, puedes preguntar cuáles son los ingredientes con los que están preparados los platos en los restaurantes. Recuerda indagar antes para detectar a tiempo cualquier tipo de producto que sepas que puede exacerbar los síntomas
Si ya conoces cuáles son los productos que empeoran tu condición, evitarlos durante el viaje y restringe el consumo de cafeína o lácteos.
8. Evita la comida de la calle
Aunque es normal que puedas llegar a antojarte de algunos productos, haz lo posible por evitarlos, ya que algunas comidas exóticas no cuentan con buenas normas de higiene, lo que puede llegar a afectarte.
Muchos de los productos de la calle también pueden ser fuente de enfermedades infecciosas transmitidas por alimentos crudos o mal preparados según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y por eso se hace necesario no olvidar que las personas con EII pueden ser bastante vulnerables.
9. Consume agua en botella
No debes olvidar la importancia de mantenerte hidratado, pero en este caso, es importante que lo hagas directamente de agua embotellada y no de los grifos, ya que muchas veces esta no es apta para el consumo humano y puede poner en riesgo tu salud si esta se encuentra contaminada