El trabajo, el estudio, las obligaciones del día a día, entre otros varios factores podrían incidir en que aumenten los niveles de estrés en ti. Conoce algunos consejos para manejar ese problema y gozar de tranquilidad aún en medio de las vicisitudes.
Equilibra lo que haces a diario
Intenta tener una agenda o itinerario donde coordines tus actividades laborales, académicas y de ocio y diversión. Eso te ayudará a mantener un control de lo que haces y, te aseguramos, comenzarás a notar cambios en los niveles de estrés.
Organiza tus tareas
Los calendarios o aplicaciones móviles juegan un papel indispensable en esta materia. Utilízalas para ver cómo harás para alcanzar tus objetivos en lo que debes hacer a diario. Dentro del tiempo que dispongas aparte un rato para reflexionar sobre tu día a día, eso te ayuda con tus niveles de estrés.
La alimentación
Aunque no lo creas, lo que ingieres a diario es indispensable para que tu avance o retroceso. Consulta con tu médico los alimentos que más te pueden aportar beneficios dependiendo de tu estado de salud. Ten en cuenta que no debes limitarte a los dulces y golosinas. Lo importante es que lo hagas con moderación.
Dormir bien
Sí, descansar lo suficiente también es indispensable para que tu estado de ánimo mejore y, por ende, se vaya el estrés. Por ello, de acuerdo con múltiples estudios, lo recomendable es dormir entre 7 u 8 ocho horas.
Ejercicio
La actividad física es una aliada en la mayoría de anomalías que afectan al ser humano y en el tema de la salud mental no es la excepción. No solo te ayuda a prevenir la ansiedad y la depresión, sino que te permite distraerte y liberar sustancias químicas responsables de causar el estrés.